Y en esta
noche de San Juan, de enamorados y hogueras, he hecho mi caminata
sola, aunque en mis ejercicios he contado con 5 chiquillos de entre 4 y 7
años, los cuales, aprovechando el riego de los aspersores, se han
calado entre carreras y risas, en plena libertad, sus mamás estaban
lejos, juntas y entretenidas, ajenas al baño de sus hijos, con ropa, y
un par de ellos, caminando sin zapatillas, con el riesgo de cortarse
con alguna chapa o cristal, se lo dije y se calzaron. En su euforia
porque ya era verano, y había que bañarse, me invitaron a hacerlo con
ellos. Pasada media hora, se despidieron, y yo conseguí acabar.
Hacía
calor, la luna se asemejaba a una tajadita de melón fluorescente, las cigüeñas erguidas parecían blancos paraguas en los abetos ennegrecidos
por la noche, viernes, vacaciones, calor y fiestas.
Nos
hemos quedado sin la tradicional hoguera, la música, el convite, la
reunión, los encuentros, los saludos... y la razón es que han decidido
centralizar el servicio de bomberos, para ahorrar, seguro que sí, que
lo harán y matarán a los pueblos, porque el suministro de agua, luz,
gas, la recogida de basuras, correos, médicos rurales.... es caro,
formas de ver la economía, claro.
Feliz noche de la magia del amor!!!