08 enero 2023

DÍA DE REYES, por Clara Blázquez Sánchez

DÍA DE REYES, por Clara Blázquez Sánchez

“Nochebuena chica” se llamaba en algunas casas. Mágica Noche de Reyes. Cena sencilla en familia, Ilusión, sonrisa, pijamas y prisa por dormir. Una luz tenue para que encontrasen la ventana...

En el pequeño patio encalado dejaron un paquete despertando con cariño a la mañana. Con cuidado, para no romper la caja de madera al abrir la tapa, la magia se escapó de su interior invadiendo todo el espacio... resplandecía cuando el sol acarició el cromado impecable de un triciclo que casi sobrepasaba en altura los grandes ojos atónitos del pequeño, que no dejaban de mirar incrédulos.

—¡Súbete, lo han dejado para ti! Hoy solo por el patio. Susurró su madre mientras le acariciaba el pelo revuelto. No se atrevía a tocar ese sueño, le daba miedo que se desvaneciera como una ilusión óptica.

Algunos lápices de color, peonzas, canicas, peladillas y piñones traían en los bolsillos sus amigos, que llegaban a casa para jugar y disfrutar con los regalos esa mañana de Reyes.

Ilusión desbordada, felicidad incontrolable había traído ese artilugio con tres ruedas, manillar y pedales, haciendo a todos los niños sonreír; unos corrían a su lado, otros empujaban y algunos daban brincos de alegría. Se iban turnando para montar en el triciclo, una vuelta que iluminaba sus ojos de alegría y parecía una feria con carrusel de risas.

El día siete de enero despertó en llanto, descalzo, limpio y encalado...

—No recuerdo si ese mismo día, hicimos un gua en la calle. Lo cierto es que, durante un tiempo, cada mañana al levantarme corrí y abrí el portón del patio, antes de coger mis canicas...

Al cabo de unos años entendió que el trabajo de su padre en la estación de ferrocarril, anotando los paquetes que iban y venían en fechas navideñas, era muy complicado, a veces. Los envíos llegaban con retraso de un par de días a su destino, dadas las fechas y ¿por qué no? no había manera de controlar que llegaran puntuales.

Tan solo una vez, única y maravillosa vez, la magia retrasó un paquete entre unas humildes paredes encaladas, iluminando la sonrisa y los sueños de unos niños que disfrutaron y vivieron sus mejores reyes, por un día...

Clara Blázquez Sánchez
07/01/23