22 mayo 2023

REMATE DE LA DESATENCIÓN, por José Luis Sánchez-Tosal Pérez

José Luis Sánchez-Tosal Pérez
REMATE DE LA DESATENCIÓN, por José Luis Sánchez-Tosal Pérez

Me acerco al mitin del PP, voy con la intención de ver qué bueno me encuentro en quienes pueden ser nos gobiernen. A la entrada saludo a Marcelino, seguido me dirijo a la escalera para ir al palco que para todos los actos procuro tener. Me gusta porque desde allí no sólo presencio estos, sino que además contemplo el palpitar de toda la sala, pero el acceso está cerrado. Me vuelvo, y Marcelino me espeta: “anda, entra paí, -señalando el patio de butacas-, jódete y da la cara”. No me molesto en contestar, y me dirijo a una platea que es el lugar más parecido al que tengo la costumbre de estar en el Teatro. Ante el recibimiento marceliano (el que dio la cara por Ciudad Rodrigo yéndose a su Serradilla) me brota aquello que enturbió el juicio a Don Quijote: “los altos cielos que de vuestra divinidad divinamente con las estrellas os fortifican, y os hacen merecedora del merecimiento que merece la vuestra grandeza”, pero yo, creo que sin, afortunadamente, haber perdido aún el juicio.

Después, ya, el mitin, con cerca de unos doscientos, que se consiguen a base de entregar en él a todos los candidatos de la comarca sus actas, y como con una veintena de ajenos a ello.

Comenzó hablando Carlos el alcalde de Salamanca, que tuvo para él como un cuarto de tiempo de todo el mitin, habló sólo de Sánchez desde los problemas de Salamanca. Acto seguido habló el eurodiputado Esteban González Pons, que ocupó más de la mitad del tiempo del acto. Unos cuantos parabienes para el actual alcalde y después todo su espacio para el malvado Sánchez, de síntomas de algo municipal poco, muy poco, podría decirse que ni aparecieron y visto cómo se desarrollaba todo ya ni se les esperaban. Y finalmente nuestro alcalde, Marcos, el cual en su cuarta parte del tiempo del mitin, dedicó bastante más de la mitad a lo de Sánchez, luego ya por fin conseguí oír algo de nuestra ciudad, era más un resumen de lo hecho que de lo que se quería hacer y de esto casi todo sobre obras civiles y poco, muy poco, sobre problemas sociales y nada del problema de nuestra sanidad comarcal, de él ni mutis.

Y llegados aquí, entre músicas y aplausos se acaba esta ignorada atención a nuestra ciudad.

Luego, cuando estaba haciendo este artículo llega el cartero con la carta electoral del PP, en la que figura una petición de Feijóo y otra de Mañueco pidiéndonos el voto municipal, sin que aparezca para nada Marcos Iglesias, que es el candidato a la alcaldía.

Fin del desatino como remate de la desatención.

¡Ah!, y que conste, que al entrar yo había sonreído y mirado a Marcelino con agrado, viendo su pérdida de volumen, por el esfuerzo que a este le habría supuesto, pero dada su reacción, más bien ahora me preocupa por su torpe grosor mental. Mejor sería que dedicara el esfuerzo a amainar este, aunque creo que esto ya visto lo visto, en él, tiene más difícil solución.