04 julio 2024

CASI TODOS A LA ESPERA, por José Luis Sánchez-Tosal Pérez

CASI TODOS A LA ESPERA, por José Luis Sánchez-Tosal Pérez - Ateneo Virtual Mirobrigense – Ciudad Rodrigo

José Luis Sánchez-Tosal Pérez
CASI TODOS A LA ESPERA, por José Luis Sánchez-Tosal Pérez

    Días atrás ha habido un Consejo de Salud, se hace uno al año, algo que a mi entender es insuficiente, qué menos que cada seis meses, y puesto que allí no puede acceder la ciudadanía más que a través de sus representantes -por cierto, que no todos asisten, una irresponsabilidad claramente manifiesta-, tendría que haber alguna fórmula que a través de los medios de comunicación se trasladara lo tratado y acordado en ellos, por ser de interés social, y no con artículos en lo que todo parece estar bien despachando así algo en lo que tanto nos va como es la medicina pública.

    Decían días atrás en la prensa que con Ciudad Rodrigo se había cumplido, puesto que se mantienen las 17 especialidades que se crearon en su día. La cuestión es de qué forma y maneras se mantienen. Por ejemplo, Neurología, viene cada dos o tres meses, provocando con ello una larga lista de espera. Los neurólogos tardan meses en verte y en ese espacio de tiempo las pruebas se hacen en la Seguridad Social con los costes para esta, y puesto que los pacientes terminan el proceso en la privada, los beneficios con para ella. Oftalmología, es desde siempre la que peor servicio da, actualmente hay 895 personas en la lista de espera, naturalmente hay cosas que no pueden esperar, y ello te lleva a la medicina privada donde aparece en el día el especialista desaparecido en la pública.

    Los oftalmólogos reclaman renovación del material, lo cierto es que siempre lo hacen cuando ya el atasco está asegurado, y luego la gerencia no reacciona con la agilidad necesaria. Llevan cuatro años sin operar en Oftalmología. Los horarios establecidos no siempre se cumplen, el odontólogo se marcha muy pronto, y con ello la lista de espera aumenta, con lo que el carril a la privada también.

     Todo esto acrecienta que el paciente se cobije en su medico generalista, que aquí ahora faltan por cubrir tres plazas, con lo que lleva a una sobrecarga de trabajo para estos ya excesiva, llegando a querer de ellos que sólo tengan siete días de vacaciones.

    Lo cierto es que este déficit de médicos viene anunciado de lejos, y nada se programó para solucionarlo, y se agravará con la avalancha de jubilaciones que se avecinan, y hace veinte años que a la Junta de Castilla y León se le anunció desde Prosalud que este problema nos iba a suceder. Esto pudiera paliarse con que vinieran a hacer prácticas los médicos MIR (este año, por una circunstancia especial no podrán hacerlas), y si cierto es que esto sería una dotación mayor de personal en lugares de la España vaciada pero en los que en verano se duplica la población, y no hay aumento de plantilla. Tampoco se consigue que los médicos se queden pagándoles poco, haciéndoles contratos de un mes y teniéndolos interinos a veces más de veinte años. Entonces es lógico que estos busquen el norte y el extranjero, donde les hacen contrato de un año y tienen mejor trato y salario. Hace pues falta incentivos que los retengan, pues las malas condiciones laborales los hacen irse de la región al extranjero y a la privada. Esto no creo que se arregle como hace Alejandro Vázquez echando las culpas al gobierno central, dado que todas las competencias son de la gerencia de Castilla y León.

    Todo ello se está paliando en cierta medida porque los trabajadores hacen piña y se ayudan entre ellos, pero dadas las carencias, no va a ser suficiente.

     En medio de este mar de déficit, a los pacientes pedirles su colaboración, hay que saber encauzar las protestas y cómo y adónde y a quién hacérselas; por ejemplo, no siendo agresivos con las personas de información, así como procurar no usar indebidamente el saturado servicio de urgencias.

     Mientras, casi todos a la espera de sabidas estas cosas que traen consigo el desprestigio de la Sanidad Pública y el empuje a la privada, en la que el que no tenga dinero se queda en la calle, qué se va a hacer para paliarlas o si se va a seguir por estas vías que puede llevar al Centro de Especialidades a terminar siendo un mero Centro de Salud. ¿Y cómo nos lo van a contar la próxima vez y cuánto van a tardar en hacerlo?