¿TURISMO?, por José Antonio Hernández Navarro
No sé si en los países de nuestro
entorno se hayan desarrollado las mismas políticas de centralización,
tanto de población como industrial, así como en España. Dicen que las
industrias deben estar unas cerca de otras, yo difiero. Puede que sea
bueno para las privadas, pero los estados han tenido y tienen muchas que
las podrían ubicar donde hubieran querido.
La
poca o nula sensibilidad política ha dado como resultado una gran
concentración de industria en cinco o seis centros, llamémoslos
´capitales´, abandonando al resto. Claro, que en una nación como la
nuestra que desde hace siglos lleva existiendo una economía cortesana,
la industria gira al rededor del Rey -en épocas pretéritas- o del Estado
ahora. Nosotros pertenecemos a ´provincias´ como dicen los de la
capital, en un tono casi despectivo. Para nosotros es la agricultura y
la ganadería una industria que ha pasado a ser residual. De más de ocho
mil pueblos productores de fruta, verdura y cereales hemos pasado a ser
plenamente consumidores, la mayoría nos abastecemos de los mismos
centros de producción que abastecen a las ciudades grandes y que muchas
veces vienen de muy lejos. La ganadería en nuestra región es extensiva,
con lo que para muchas cabezas se necesitan muy pocos puestos de trabajo
y la posibilidad de crearlos en fábricas de transformación es nula, ya
que simplemente, no hay. En España la industria en general proporciona
un porcentaje de empleo insuficiente, eso está claro, y en estos
momentos la apuesta más grande está en el turismo, que aunque el empleo
no es de mucha calidad, sí proporciona muchos puestos de trabajo.
Y ahí es donde quiero llegar, ¿La comarca de Ciudad Rodrigo está preparado para rentabilizar el turismo que nos llega?
Desde el Ayuntamiento y la Concejalía de Turismo se están haciendo
esfuerzos para atraer visitantes, pero está claro que o no basta, o lo
que ofrecemos no es lo suficientemente atractivo. Solo hay que hablar
con cualquier guía de grandes tour operadores para saber que esta
industria pasa inexorablemente por unos servicios competitivos, tiendas,
restaurantes, hoteles. Pensemos en todo lo que estamos perdiendo por no
escucharles. Perdemos la posibilidad de crear empleo y un desarrollo
sostenible de nuestras comunidades. Perdemos visibilidad, interés,
riqueza.
Teniendo una
ciudad tan bonita y una comarca tan interesante no me puedo explicar
cómo no se fijan en esta zona los inversores, ¿Será que no se le dan las
facilidades para invertir?
Pensemos en el futuro, que ya está aquí.