NUESTRA TIERRA, por Mara Guadalix
NUESTRA TIERRA
Pocos cielos son tan limpios,
de un azul tan radiante,
como los de Castilla en primavera.
Pocos son tan hermosos,
espejo de agua donde se recorten los cerezos en flor..
Pocos son los que tiñen horizontes con lenguas de fuego que devoran,
Menos aún los poblados de estrellas, destellos de plata en azabache.
Así es el cielo y la gente de esta tierra dura y seca,
callada y profunda, brillante y dorada,
con fiestas de luto y de disfraces,
bullicio y bailes, gaitas y tamboriles,
llena de magia.
Somos el suelo que nos nutre,
el sol que nos calienta,
el río que nos lleva y el cielo que nos tapa.
Somos rumor del viento capaz de avivar todos los fuegos.