SOMOS MILES DE PARTES EN UNA, por Mara Guadalix
Quisiera despojarme de lo humano,
quisiera ser capaz de andar sin cuerpo,
pero mis sentimientos no son aire o idea,
y mis pies se agarran como raíces a la tierra,
mis manos se aferran al abrazo de otro cuerpo,
en mi plenitud de luna llena.
Soy mortal, pasión perecedera,
amapola que dura un par de amaneceres y marchita,
instante entre crisálida y mariposa,
gota de agua devorada en la sed,
y arrullo de torcaces palomas.
Mientras mis ojos brillen, dame vida,
porque la sangre bulle en mí, no me condenes.